Elegir el mejor aislante para una fachada es una de las decisiones más importantes a la hora de realizar el diseño de un edificio, ya que de él dependerá en buena medida la calidad de vida de sus ocupantes.
La normativa vigente en el ámbito de la construcción residencial establece unos criterios mínimos que deben cumplir los sistemas de aislamiento de los edificios para garantizar la eficiencia energética y habitabilidad de este. Para mejorar el aislamiento térmico, hay que identificar cuáles son los principales puntos de fuga ya que dependerá del tipo de vivienda que tengamos. Normalmente estos suelen ser: fachadas, paredes, techos, suelos y ventanas y puertas. Identificarlo nos ayudará a poder elegir el mejor aislante para nuestra vivienda.
En cuanto al aislante para una fachada, en el mercado existen múltiples soluciones. Pero hay que tener en cuenta que no todas ellas son igualmente eficaces, ni suponen el mismo coste de ejecución ni de eficiencia. Por ello, a continuación vamos a dar algunas pautas sobre cómo elegir el mejor aislante para una fachada.
Consejos para elegir el mejor aislante para una fachada
Toda reforma energética debe ser capaz de mejorar el aislamiento del edificio, sin que su ejecución interfiera en la vida del interior del inmueble. Además, la rehabilitación energética de la fachada no debe manchar nada dentro del edificio, ni tampoco puede reducir la superficie útil de la vivienda.
Con el aislamiento térmico de la fachada, además de eliminar todos los puentes térmicos del cerramiento, se consigue reforzar la propia estructura de la envolvente del edificio.
El abanico de sistemas de aislamiento es variado, aunque siempre condicionado por las características constructivas. Como el tipo de muro o el espacio a un lado y otro del mismo. A la hora de buscar un aislante para una fachada se puede optar por materiales como el poliestireno, las lanas minerales o el poliuretano.
Las características que debe cumplir un buen aislante para una fachada:
- Eliminación de los puentes térmicos.
- Eliminación de las condensaciones y filtraciones por humedades.
- No afectar al espacio del interior del edificio.
- Corregir fisuras y grietas de la envolvente.
- Proteger la estructura frente a choques térmicos.
Mejor aislante para una fachada
Hoy en día, hay múltiples soluciones de aislamiento térmico en el mercado. Por ello es muy difícil discernir cuál es el mejor aislante térmico, ya que dependerá de las condiciones específicas de cada obra y de los objetivos que se deseen conseguir. Pero en resumen a grandes rasgos, podemos elegir estos como los sistemas más destacados:
Sistema SATE de aislamiento de fachadas
Si hay un sistema que destaca sobre todas las soluciones aislantes que hay a día de hoy en el mercado y es el sistema de aislamiento térmico exterior. Más conocido por sus siglas SATE. Esta solución para fachadas consiste en la aplicación a la fachada exterior de un revestimiento de mortero aislante, protegido con un mortero mineral. La fijación del material aislante se hace tanto de forma adhesiva como mecánica.
SATE es uno de los sistemas más eficaces como aislante para una fachada de un edificio. Su gasto se amortiza en un periodo aproximado de diez años. Además, contribuye a disminuir las pérdidas energéticas en más de un 50%.
Sistemas de poliuretano para fachadas: calidad y adaptabilidad
Los sistemas de poliuretano son uno de los mejores materiales en términos de capacidad aislante. Además, poseen una gran capacidad de adaptación y versatilidad. Por ello, los sistemas de poliuretano son una de las opciones más escogidas por su eficiencia en relación calidad-precio.
Cuando las condiciones de la construcción hagan recomendable aislar por el exterior se optará por el poliuretano proyectado para fachada ventilada. O por los paneles sándwich de poliuretano para fachada sin ventilar.
En el caso de aislamientos por el interior, lo más recomendable puede ser optar por las planchas de poliuretano. Ya que aíslan un 50% más que la lana de roca. O bien utilizar poliuretano inyectado, la opción que se adapta al relleno de cámaras de aire.
Además, las diferencias entre poliestireno expandido, poliestireno extruido, lanas minerales y sistemas de poliuretano (PUR) son de pocos decimales. No obstante, pueden representar una diferencia de 3-4 cm que para obtener una misma prestación térmica.