Aunque muchas personas no lo sepan hay varios tipos de humedad en las paredes y es importante saber cómo identificarlas, ya que lleva a su corrección más temprana. Ten en cuenta que estos son problemas recurrentes en las viviendas, por lo que aquí vamos a explicarte todo lo que debes saber sobre las humedades y los tipos que hay.

Tipos de humedad en las paredes

Antes de pasar a los tipos de humedad en las paredes es importante que sepas que esto no solo daña los muebles, sino que es un peligro para las personas, ya que puede generar problemas respiratorios o alergia. Dicho estos los tipos de humedad son:

Humedad por accidente en paredes

Esto se genera porque ocurre una fisura o rotura en una instalación como tubería de suministros o en el desagüe. Las mismas se pueden identificar fácilmente, ya que las manchas son puntuales y aisladas. Hay que mencionar que aunque se pueden producir en las paredes, hay que tener cuidado con las que se producen en el techo, ya que pueden generar goteras.

Para evitarla se recomienda colocar pasatubos y coquillas ya que ofrecen la holgura suficiente en todas las direcciones para evitar roturas. Si la humedad ya se ha producido se va a tener que demoler o picar en la zona afectada para encontrar la tubería rota y arreglarla.

Humedades por filtración

En este caso el origen de la humanidad es externo, por ejemplo, lluvias o aguas subterráneas, las cuales llegan hasta un material poroso que absorbe el agua. Por lo general la causa es la mala ejecución de la obra, sobre todo cuando se trata de impermeabilizar o en la elaboración de desagüe.

Para identificarlas debemos ver la ubicación de la mancha, ya que suelen surgir en parámetros expuestos al exterior o que estén en contacto con el terreno. Si se quieren evitar se tiene que impermeabilizar, y es importante que el trabajo lo haga un profesional. En el caso de que se haya producido la humedad, la solución puede ser muy variada, ya que va a depender de la zona donde se genere la humedad y el origen de la misma.

Humedad por capilaridad

En este caso la humedad surge de forma similar a la anterior, aunque las situaciones cambian un poco, ya que aquí la succión de agua es por intersticios microscópicos o poros de pequeño tamaño. Serán estos materiales los que absorban lentamente el agua del terreno en el cual entra en contacto, por lo que además de ser uno de los tipos de humedad en las paredes, se puede producir en otros sitios.

Para identificarla es importante fijarse en su posición y crecimiento, ya que estas suelen presentarse en la parte baja de las paredes, ya que son las que entran en contacto con el agua del territorio. Sin embargo, esto basta para que la humedad vaya subiendo lentamente, hasta llegar a otras zonas.

Lo ideal para evitar su aparición es realizar una correcta impermeabilización o realizar un drenaje del agua del terreno. Si la humedad se produce, la solución suele ser la excavación, la cual suele ser costosa, pero se debe realizar ya que si avanza dañara la estructura general de la vivienda o edificio.

Humedad por condensación

Por último pero no menos importante en esta lista de los diferentes tipos de humedad en las paredes tenemos la ocasionada por el alto índice de humedad en el aire. Será esta humedad en el ambiente la que entrará en contacto con superficies frías como las paredes, de modo que se condensa y formará gotas de agua.

Se debe tener mucho cuidado con este tipo de humedad, ya que pueden llevar a la aparición de mohos en paredes, techos, mobiliario, ropa, cajones, etc. Este hecho hace que sea más fácil identificarlas, de hecho en ocasiones es posible ver las pequeñas gotas de agua formadas por la condensación.

Una de las mejores formas de eliminarla es por medio de una correcta ventilación, de este modo se evita que haya humedad en el aire. En el caso de que ya se haya producido la humedad se recomienda realizar una limpieza y saneamiento de la zona. A esto debemos sumarle una correcta ventilación diaria en las zonas afectadas.