Para reducir el consumo energético y contribuir con el ahorro es imprescindible rehabilitar energéticamente edificios. En España, el sector residencial está conformado por al menos 25 millones de viviendas, lo cual implica un nivel de consumo total que asciende a un 20 % a nivel nacional y que no resulta viable bajo ninguna circunstancia. Por ello, es importante conocer cómo rehabilitar energéticamente edificios.
¿Por qué rehabilitar energéticamente edificios?
El consumo de energía en muchos casos es tan elevado que, en España, muchas familias asumen la incapacidad de poder mantener las viviendas a temperaturas adecuadas en relación a las condiciones del clima. Esta situación es la que se conoce como pobreza energética. Como consecuencia, se prolifera el moho, la humedad y el consumo incide en la disminución de los recursos.
Tanto a nivel global como nacional es imprescindible fomentar la reducción del consumo energético, debido a la garantía de seguridad de abastecimiento, la preservación medioambiental y la situación en materia de economía.
Importancia en la rehabilitar energéticamente edificios
Rehabilitar energéticamente edificios proporciona beneficios medioambientales al facilitar la sostenibilidad de la vivienda y, además, permite a los inquilinos ahorrarse dinero al disponer de la optimización de los sistemas de aislamiento térmico de la vivienda.
Al rehabilitar energéticamente el edificio es posible obtener un certificado energético positivo. Este documento que registra el consumo de energía en un inmueble es imprescindible para cualquier trámite de alquiler o venta de viviendas. Y, es que será positivo al contener indicadores de consumo bajo de energía.
Medidas a tomar para eficiencia energética en edificios
La rehabilitación energética de una vivienda supone reducir el consumo de energía en un 60 %. Además, rehabilitar energéticamente un edificio en su totalidad ampliará la reducción de la demanda de energía de manera considerable. Por ello, es importante aplicar las siguientes medidas para rehabilitar energéticamente edificios.
Sustitución de ventanas
La sustitución de ventanas es un paso primordial en la rehabilitación energética de edificios. De manera que, para mejorar el aislamiento térmico se recomienda instalar ventanas con doble vidrio que incluyan rotura de puente térmico.
Las mejores ventanas son las de PVC con cristales bajo emisivos. Estas ventanas tienen la cualidad de permitir el paso de los rayos solares y evitar que se pierda la temperatura cálida en épocas frías.
Aislamiento de paredes
La rehabilitación de las fachadas posibilita aplicar el adecuado aislamiento de las paredes. Una de las técnicas más empleadas para aislar térmicamente es el trasdosado, que consiste en instalar el aislante térmico en las paredes del interior de las habitaciones.
Otra de las técnicas para el aislamiento de paredes es el insuflado consiste en inyectar aislante en la cámara de aire envolvente.
Aislamiento de techos y suelos
Consiste en aplicar un techo falso con material aislante o placas debajo del pavimento. Ambas técnicas generan la pérdida de algunos centímetros de espacio.
Aislamiento de tuberías
Se aconseja proteger con material aislante las tuberías de agua fría y caliente, con el propósito de disminuir la fuga de calor, las condensaciones y el deterioro ocasionado por los cambios de temperatura violentos.
Implementación de energías renovables
La rehabilitación energética de edificios contempla la implementación de energías renovables, según puedan adaptarse a las características del inmueble.
Entre las opciones en energías renovables que pueden ser aplicadas en edificios están la instalación de paneles solares para generar electricidad o para tareas más sencillas como el calentamiento de agua, el aislamiento geotérmico o la biomasa.
Equipamiento eficiente
Así como es importante la instalación de un buen aislamiento térmico también lo es la utilización de equipamiento de bajo consumo. Emplear aparatos eficientes e instalarlos en lugares adecuados será fundamental para disminuir el monto de facturación de la energía eléctrica.
Rehabilitar energéticamente: Líneas de actuación para el ahorro energético
En resumen, la eficiencia energética de un edificio depende del aislamiento térmico, la ventilación y la ausencia de pérdidas de energía. Por ello, para mantener estos tres puntos importantes es necesario cumplir las siguientes actuaciones en materia de rehabilitación de edificios:
- Aislamiento térmico: aislar de la manera adecuada la fachada y el tejado, así como instalar ventanas aislantes.
- Evitar corrientes de aire: es primordial evitar la presencia de rejillas, fisuras, espacios entre las ventanas y la pared, pues facilitan la fuga de energía.
También es recomendable al rehabilitar energéticamente implementar sistemas de ventilación controlada que eviten la pérdida de calor en el edificio.