La rehabilitación energética de los edificios ya construidos, y la realización de nuevos proyectos de construcción que contemplen este ámbito, es un problema actual. Pues la colocación de aislamiento de los hogares, contribuye a cubrir necesidades de seguridad y ahorro energético, básicas para el confort.
El ahorro energético como premisa ante el calentamiento global
La necesidad de reducir las emisiones de carbono, replanteada en la última Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático, COP 27, ha evidenciado que falta mucho por hacer en lo que se refiere a la rehabilitación energética de los hogares españoles.
Según el presidente de AFELMA, Señor Óscar del Río, un aislamiento térmico bueno, mejora la eficiencia en el uso de la energía. Logrando así, la disminución sustancial en los costes por consumo eléctrico.
Por su parte, la ANDIMAT insiste en que, con la descarbonización de los edificios, a través de la rehabilitación y el aislamiento de los hogares, se puede lograr una considerable reducción de las emisiones. Ya que, se disminuye la huella de carbono del edificio, generando un ahorro energético.
¿En qué consiste la rehabilitación energética?
La rehabilitación energética consiste en lograr que, por medio de la rehabilitación de las fachadas, utilizando aislamientos térmicos, se minimice el impacto del calentamiento global a la par de reducir el consumo de energía eléctrica.
Asimismo, la colocación de aislamiento en las paredes, techos y ventanas de un edificio, al ser materiales aislantes del calor, del fuego y del sonido, permiten una alta eficiencia energética, pero solo se logra con la reestructuración profunda de los edificios.
Con el aislante, al ingresar menos calor del ambiente exterior, se hace innecesario el uso de aires acondicionados y otros artículos para enfriar el ambiente interno de la vivienda. Igualmente, en invierno, el calor interior se dispersará menos hacia afuera, disminuyendo el consumo de los calefactores.
Además, al aislar los sonidos externos, se logra que el ambiente de la vivienda sea mucho más confortable. Otra ventaja del aislamiento de los hogares es que al ser ignifugo aumenta la seguridad del hogar al disminuir el riesgo de incendios.
El aislamiento de los hogares ¿Qué materiales se utilizan?
Un buen aislamiento térmico, es aquel que reduce la necesidad de usar aparatos eléctricos o a combustible, para obtener confort higrotérmico. El uso de aislantes para las paredes, techos y ventanas varía según el clima reinante donde se ubica la vivienda.
En zonas con estaciones marcadas, el uso de aislamiento de los hogares de máxima eficiencia hace la diferencia, no solo en el confort con que se vive sino también, en el recibo de energía eléctrica y en la cantidad de emisiones de carbono que se generan por metro cuadrado de construcción al año.
Los materiales utilizados para aislamiento son los polímeros sintéticos, las lanas minerales, partículas minerales de perlita y vermiculita, materiales naturales de origen vegetal como corcho, algodón y paja y fibras de origen animal como la lana.
Ventajas de algunos aislantes
Entre los aislantes más usados en España, hay una variedad importante, la colocación de uno u otro está en función de su eficiencia, pero también de su coste. Indudablemente, lo ideal es colocar el aislante más eficiente, sin embargo, con la economía actual resulta difícil.
La lana de vidrio, es uno de los aislantes más usados. Está constituida por filamentos poliméricos finos que aportan buenas propiedades como aislante acústico, además de ser un eficiente aislante térmico e ignifugo.
El poliestireno expandido que es un polímero termoplástico. Otorga gran aislamiento térmico, es ligero pero resistente y se amolda a diferentes espacios. Usado en techos ayuda a reforzar su estructura gracias a su resistencia mecánica.
Las lanas minerales son consideradas muy buen aislamiento de los hogares. Ya que poseen eficientes niveles de aislamiento térmico, acústico y aislamiento al fuego. Su única desventaja es su coste respecto a otros aislantes.
La espuma de poliuretano termoestable, de fácil aplicación, para usarse en paneles. Por su poco grosor, con buena eficiencia de aislamiento térmico, acústico y además de ser ignifuga e higroscópica. Puede presentar problemas de toxicidad y su coste es alto.
La prioridad económica: el aislamiento de los hogares
En la actualidad y con la problemática ambiental existente el aislamiento de los hogares a nivel energético es de suma importancia, las políticas gubernamentales y de la UE de subsidiar la rehabilitación energética, deben consolidarse para cumplir los objetivos planteados para la reducción de emisiones de carbono en 2030.