Con la llegada de la nueva temporada, se hace necesario ejecutar una evaluación de las condiciones de las fachadas de nuestras construcciones, para proceder a restaurar lo que sea necesario. Todo esto, debe realizarse no solo porque es el área más visible de las edificaciones, sino porque gracias a su buen funcionamiento se tienen temperaturas idóneas en su interior. Dicho esto, a continuación, te dejaremos las mejores soluciones para rehabilitar fachadas.
¿Cuáles son las mejores soluciones para rehabilitar fachadas?
Si lo que quieres es dar una óptima respuesta a las soluciones para rehabilitar fachadas, es necesario que tengas en cuenta los diversos mecanismos que puedes poner en práctica. No obstante, antes de cualquier proceso, lo esencial es comunicarse con los profesionales en el tema. Con base en las modificaciones que se deban realizar, estos te ofrecerán los siguientes servicios:
1. Rehabilitación con sistema SATE
El Sistema de Aislamiento Térmico para el Exterior (SATE), es un mecanismo que permite aplicar en la fachada un tipo de revestimiento completamente aislante al que también se le añade un mortero. Lo mejor de todo es que, la fijación de los materiales se puede realizar de forma mecánica o con adhesivos.
Cabe destacar que, estas rehabilitaciones suelen venir como en presentación de un kit y son útiles, tanto para aquellas construcciones nuevas, como para aquellas que ya tienen un tiempo o que son bastante antiguas. Con esto, no solo se mejora la estética de la fechada, sino que se eliminan los puentes térmicos, los mantenimientos son más reducidos y se mejora todo el control de temperaturas internas, entre muchas cosas más.
2. Rehabilitación con fachadas ventiladas
Cuando se aplican los sistemas de fachadas ventiladas, se está instalando un aislamiento rígido o semirrígido, el cual suele presentarse en materiales de poliuretano proyectado, en planchas de poliuretano, en lana mineral o en hojas de protección. Cualquiera de estos mecanismos es aplicado con una separación de modo que se cree una cámara por donde circule el aire.
En otras palabras, la fachada ventilada está conformada por una hoja interior, una capa aislante y a ello se le agrega otro tipo de hoja exterior. De esta manera, se evitarán las infiltraciones de agua por estas áreas de la construcción. Además de ello, mejora el sistema acústico, disminuye las incidencias por la radiación solar y elimina los problemas de humedad y condensación.
3. Rehabilitación con sistema de inyección de aislamiento en cámara
Otra de las soluciones para rehabilitar fachadas es la de la inyección al sistema de la cámara. Comúnmente, este proceso se ejecuta cuando la construcción no permite que las labores se desarrollen en el área externa. Por tanto, se procede a inyectar un sistema de aislamiento en la cámara de aire, en la mayoría de los casos se utiliza espuma de poliuretano.
Es importante destacar que, este mecanismo se implementa sobre todo cuando no se tienen más alternativas o cuando, los usuarios no quieren disminuir algunos centímetros de espacio. Lo esencial es que este tipo de solución, no requiere que se realicen labores en el interior del edificio, ni de mantenimientos posteriores. Sin duda alguna, es un trabajo que garantiza rigidez a la estructura de la fachada.
4. Rehabilitación con sistema de aislamiento térmico por el interior
En este caso, los trabajos se llevan en el interior del inmueble y básicamente, lo que se busca es revestir las diversas áreas con el material que sea el más adecuado. Durante estos trabajos, se suelen utilizar el poliuretano, las lanas minerales o el poliestireno expandido.
Aunado a lo anterior, se le suele adicionar placas de yeso laminado, ladrillos y cualquier otro material que los expertos consideren necesarios. Es importante mencionar que, aunque proporciona muchos beneficios es un tipo de solución que no resuelve del todo los puentes térmicos.
Como puedes ver, son muchas las soluciones para rehabilitar fachadas que se tienen en la actualidad. No obstante, es indispensable que cada cierto tiempo solicites la valoración de un profesional en estos temas. Solo de esta manera podrás determinar si aún se mantiene en adecuadas condiciones o requiere de un mantenimiento.
Ten presente que, una edificación debe ser rehabilitada de manera térmica por los menos cada 20 años, es la única manera de conservar su durabilidad.